Hay un conjunto de asuntos sobre los que pivota toda la política occidental, claramente, por otra parte, articulados entre si:
El aborto masivo y como un derecho fundamental. Esto es (me parece) ya irreversible.
La ideología de género y sus derivados: los vientres de alquiler, el cambio de sexo a petición del interesado, matrimonio a la carta para homosexuales, presunta persecución y condena (me temo que hasta nueva orden) del abuso sexual de menores, las llamadas leyes contra la violencia de género... (El sexo no existe: es una construcción sociocultural.)
Aceptación ---o imposición--- de las migraciones masivas, lo que conlleva la aceptación pasiva de la inmigración ilegal.
Lucha perenne contra el racismo que afecta a los negros, entendiendo esa lucha desde presupuestos ideológicos creados ex profeso para ella. O exhaltación del indigenismo --- otra vez como ideología--donde no se da ese problema.
Como esta agenda está marcadamente articulada no puede no provenir de un plan detallado y militarmente ejecutado. Y esta es mi conjetura:
Este plan nace y se difunde desde los EEUU y su brazo armado la OTAN. Todos los países bajo la dominación militar vigente americana tienen que acatar ----e implementar--- la agenda completa. Por cierto, la iglesia llamada católica no es una excepción y contribuye con ardor y fe ciega a ella. (Queda una honrosa, o milagrosa excepción, hoy día: Hungría.)
Es una dominación imperialista y militar que supone de hecho la dominación absoluta cognitiva de todo individuo y de la sociedad entera.
Ahora la guerra ha mutado y es, también, o sobre todo, cognitiva.
Esta imposición, este avasallamiento de toda conciencia libre, creativa o racional va camino de ser total. De hecho, está a punto de consumarse. La consumación supondrá la desaparición de las naciones, las patrias, las comunidades y la persona.