Las cosas son como son no como parecen ser.

Desde que con 12 años vi una película de suspense en la que un ciego oye una conversación -por casualidad- en una cafetería en la que se relata un plan para cometer un asesinato, cosas parecidas me han ido sucediendo a lo largo de mi vida. Antes de llegar a la última, quiero relatar algunas, solo algunas, de las anteriores:

He visto a un rey el día después de unas elecciones generales -en un famoso restaurante- celebrar la victoria del ganador.

He oído en una tasca a un ministro hacer increpaciones gravísimas a las que poco después les encontraría sentido.

He visto a una reina asistir de incógnito -sin ser vista o reconocida- a un noble espectáculo.

He estado sentado en una cafetería de Madrid cerca de un importante político asesinado días después en una ciudad lejos de Madrid.

He visto a un presidente de una muy relevante conferencia episcopal ir a una reunión importante un domingo por la tarde. Andaba perdido y me paró para preguntarme dónde estaba la calle que buscaba. Por eso sé dónde iba. Él no tenía por qué saber que yo le había reconocido.

Pues bien, el otro día en un parque madrileño oí la siguiente conversación entre dos importantes personalidades, aunque yo solo reconocí a una de ellas. Anochecía, creo que por eso no se percataron de mi presencia. Una mujer y un hombre.

Resumo y relleno las lagunas de las cosas que no llegué a entender.

PS es un servidor de FVI.

Una vez que FVI fue coronado se puso en marcha la operación para llevarlo a la secretaria del partido (2014). La moción de censura que le hizo presidente del gobierno fue organizada por el propio monarca (2018). La racionalidad de la estrategia estriba en la consolidación de la corona. La realeza cree que al igual que un gobierno socialista limpió el pasado franquista del emérito, un gobierno socialista debe terminar por limpiar el origen franquista de la restauración querida por el Generalísimo. De hecho, el juramento de la heredera (2023) lo gestionó un gobierno presuntamente “socialcomunista”. Del mismo modo, la exhumación del Caudillo fue negociada directamente por el monarca con el papa del momento. Las pretensiones monárquicas son alargar el mandato de PS todo lo posible, hablaron de como mínimo 11 años (lleva 7), con vistas al matrimonio de la heredera y a su eventual coronación. La casa real cree que con los socialistas toreando de muleta al toro español la faena será mucho más fácil. Por supuesto, toda la estrategia globalista del actual gobierno está refrendada y, muchas veces, dirigida por el propio titular de la institución. Cuando el hombre preguntó a la mujer qué pasaría si la gente supiera la verdad de todo esto, le contestó rápida y sucintamente que nadie lo creería.

Efectivamente la gente no quiere oír la verdad prefiere que le cuenten cuentos.

Y sé todos los cuentos.

Oí más cosas, pero no quiero contarlas porque ni yo mismo me las quiero creer, de brutales que son.